jueves, 29 de abril de 2010

nuevo para el libro...

Un león enjaulado
En una jungla de asfalto,
Privado del color y la vida,
Vivir prisionero de los deseos
Y de la misma muerte.
Esperanzado, ilusionado,
Tal vez muerto…

Un león libre
En zoológico de la vida,
Caminando encadenado
Por los remordimientos,
La soledad atormentándolo
Mientras el sol se va
en busca de un nuevo amanecer.

Un león tratando de rugir
Sofocado por una bofetada
De sarcasmo…

Mientras la pasión muere
Las garras se afilan,
Y busca huracanes…

Un león más en la manada,
Gris y solo,
Acompañado por la vida
Y su Alma.
Un león cualquiera,
De los que ves en el bus…
Un león como otros,
Que tiene su “casa”,
A la que le forzan llamarle hogar….
Los colmillos ausentes,
En desuso.
Con la sed de cualquiera,
En busca de una presa…

Un león apresado
Por el delito de vivir,
El más penado de los delitos
Por las nuevas leyes de la vida…
Cualquiera que vea al león
Vera a un gatito cualquiera de tejado,
Normal, sin melena ni garras fuertes
Pequeño y poco peligroso…
Indefenso.

Con la mirada ausente,
Perdido en los pensamientos
De los miles de hubiera.
Contando los segundos que le quedan para vivir,
Sobrevivir, resucitar…
Sometiéndose al látigo de aquel que le ignora,
Y de quien quiere su atención…
Un león de aquellos,
Que son volátiles como las esfinges…
Esencias de lo perdido en el olfato,
Y lamentos condimentados
Con el fruto del despecho.

Dos zarpazos y caer rendido
Ante un león poderoso
E intimidante, que lastima,
Hiere y asesina sin detenerse
Ante el conocimiento de futuros remordimientos.

Ayeres perdidos
Entre la melodía constante
Fruto del amor de las flores
Y el viento, quien junto a la brisa,
Las poseen cada mañana,
Para perfumar el camino
Por el cual va el león andando,
Para que no perciba
El hedor de la envidia y el desprecio,
Tan cansinos como aquel
Que se empeña en no sobrevivir,
Aun sabiendo que todo en él está muy bien.

León con las garras
preparadas para atacar cada que puede
y poseer a su presa y manipularla antes de hacerlo
por completo suyo,
devorarlo y luego dejarlo ir.
León que juega antes de comer
Y si el juego le aburre
Solo asesina a su presa.

Arrodillándose ante los mil miedos
Que existen en su corazón negro
Mal influenciado y falto de sentimientos.

Un león poeta que abre
Su pensar solo cuando explota
Y no cabe en su cabeza,
Que gotea palabras,
Y salpica todo de sentimientos,
Amarrándose con cada uno de ellos
A la vida que lo abandona un poco
Cada segundo que pasa,
Deseando pensar más allá del futuro,
Aniquilando sentimientos y desconciertos,
Con la sencillez de aquel suspiro
De arboles silenciosos,
Cantantes y artistas….
Que disfruta de la belleza que lo rodea,
Y que se detiene a pensar en su mortalidad.
Desahuciado, carcomido y engañado,
Con un recuerdo vago
De lo que necesita para sonreír.

La razón perdida de sus amarguras
Diminutas que van en contra
De su enemistad con el bando de los malos.

Un león de aquellos
Que caminan por la calle
Sin melena y con traje,
Encerrados…
Un león que no encaja
En el cuerpo de una mujer desesperada,
Que no sabe si dejar que el deseo la consuma,
De una mujer que se oculta
De quien no puede verla
Entrar en ese mundo temido.
Con las esencias mezcladas,
Del león enjaulado en su cuerpo,
Domado y sometido,
Desorientado….
Como aquel papalote
Al viento que va a parar
A unos arbustos,
Dejando emanar toda la porquería
De la sociedad,
E intentar limpiarla
Al tiempo que deseas el cambio
Con una sonrisa ausente y mecánica.
Deteniéndose ante la inmensidad del nubilakhan
Que todo significa,
Todo eso que tantos temen….
Admirando cada segundo la belleza
De los astros terrestres
Que le iluminan el camino,
Que protegen su andar,
Y ven por un minino desprotegido
Que va en busca de su nubilakhan
Perfecto para sobrevivir
Ante el desastre que ocurre cada mañana
En su pequeña casa,
Hogar lleno de desprecio
Y desesperanza.
O quizá solo incomprensión….
Un ser desprotegido
Y sensible a cada cambio
En su entorno invisible,
Duro e hiriente.
Condenado a sobrevivir
En una mente desquiciada,
Alocada, sometida al deseo de un poco de carne,
Lujuria, y pasión…

Desempeñando su papel
De maldito descorazonado,
Cual actor en una carroza fúnebre,
Alimentada de recuerdos
De vidas paralelas,
En una realidad absurda.
Desorientando a la brújula precisa
Del destino, y enviándola
Al camino sin retorno.
Ocultando al ser desprotegido
Que adquiere garras y experiencia,
Limitándose a buscar la rosa de los vientos
Deshojada por el sol.
Y un millón de sentimientos insufribles,
Torturantes y asesinos de sueños…
Luces de colores maravillando
La vista del viajero, en el camino que su destino
Trazo alguna vez.
Detenido en una bifurcación,
Porque cayó en el entronque equivocado….
E intentando enmendar el camino.

viernes, 23 de abril de 2010

muchas veces quisiera que mis musas permanecieran conmigo todo el tiempo... que anden aqui rondando mi mente, que siempre me rodeen... que no me abandonen por meses...

talvez si mis musas estuvieran conmigo todo el tiempo escribiria mas.... tomaria mas fotos, diseñaria...

si mis musas permanecieran conmigo mas de unas horas, muchos escritos no se quedarian en el viento...

no se que hacer con mis musas, si enjaularlas o ponerles oficina...

seria bueno que fueran ya parte permanente de mi vida... y no tan fugaces...
pero si esto sucediera, no seria algo sorprendente que escriba algo...

talvez mis musas vengan a mi cuando me consiguen algo bueno... un buen elixir de inspiracion... unas gotas de dulzura y el aroma de un buen amor...

talvez mis musas solo vienen a hacerme compañía cuando estoy sola, cuando las necesito realmente...

talvez lo que escribo carezca de metrica, estilo, fluidez y "belleza" de lenguaje, pero me sale del alma, es lo que en verdad siento o algo me hace sentir...

extraño a morti... =S
me despido... hoy algo corto, pero salido del alma...

tengo mi cabezitalocademasiadorevueltaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa


aaaaaiiiiiisss.... :S