martes, 10 de diciembre de 2013

Hay amores...

Sin duda alguna han sido 3 los amores de mi vida, cada uno a su modo y cada uno con sus recuerdos y su intensidad. Eso si, a los 3 los he amado con toda el alma, a los 3 los amo en cierta forma, y los 3 siempre serán parte de mi.

El primero llego a mis 9 años, admirándolo y respetándolo desde el primer día que lo escuche, nunca me imagine que 7 años después lo tendría tan cerca de mi que creería poder tocarlo, y menos aun que 2 años mas tarde lo tendría frente a mi, y estaríamos compartiendo cervezas y un desayuno bastante peculiar. A este amor grandote lo amo y siempre lo amaré, me trae tantas alegrías como lágrimas amargas me dio un día. Pero las sonrisas siempre son lo que predominan, esa pequeña complicidad que siento cuando me toma entre sus brazos y me abraza tan fuerte que no puedo respirar, me deja sin oxigeno y cuando inhalo nuevamente solo puedo olerlo a el.
Es el amor grande que siempre amare por ser como es, y por todo lo que me ha dado.
Aun cuando siempre me pregunto si me recordara... si recordara lo ultimo que platicamos o la ultima vez que nos vimos. Ese es el amor que amo a distancia, y lo se ajeno, y lo se libre y libre lo amo.
Es el amor que me enseño que "las cosas nunca van tan mal como para no sonreír"

El segundo llego justo 1 semana antes de que besara por ultima vez a mi primer gran amor. Este es un amor vivo e intenso, es un amor tan agradable y que me enseñó tanto... que sigue enseñándome mucho a pesar de todo. Me hizo feliz con su espontaneidad y su pasión. Es ese el que compartía mi extraña superstición de no usar calcetines en par... Es ese que me enseño que se debe ser feliz siempre, pase lo que pase... me enseño a sonreír aun cuando estaba llorando a mares, me enseño que la felicidad es ase.
Este amor lo amo por libre y sensible, por ser romántico a su modo... por darle pasión a mi vida, me enseño a aprender a aceptar a las personas tal y como son, sin querer cambiarlas, por que después de todo yo lo ame así, tal y como es, y el siempre ha sido honesto, siempre ha sido claro conmigo... Me enseño que el amor es libre y siempre sincero, y todo lo perdona.
Este amor me enseño que se debe saber esperar, y que se deben aceptar los regalos de la vida tal y como te los otorga, aun cuando la presentación o la envoltura no sean como lo esperabas...
¿Eres feliz?

Al tercer amor lo conocí gracias al segundo... y este me enseño a aprender a confiar cuando se tiene el corazón roto. Este amor me enseño a entregar el corazón, y aunque no es del todo bueno, aprendí que no se debe entregar todo a una sola persona. Tal vez por eso nunca deje de amar a mis otros dos amores...
Este amor me hizo sufrir y me enseño lo que es sufrir por amor, me enseño lo que es beber tus propias lagrimas y con el ultimo trago pedir mas.
De este amor aprendí que puedo salir de la depresión mas fuerte por mi misma, y confirmo la enseñanza de mi otro amor "el amor debe ser honesto" y desde el principio debí sospechar, algo ocultaba, no era honesto al 100%, y cuando lo descubrí el mundo que el me había pintado se derrumbo, y ahí me encontré yo entre los escombros, con el rostro bañado en lágrimas y sin poder entender por que se había derrumbado lo mas bello que había tenido.
De este amor aprendí que los cimientos deben ser firmes, deben ser fuertes, deben ser buenos... y si no estas seguro de ello no debes poner todo tu corazón en ello, por que al forzarlos, todo se caerá y el golpe sera aun mas doloroso.
Este amor me dejo bellos recuerdos, aun cuando también me dejo muchos muy malos y amargos.
De el también aprendí que puedo perdonar lo que antes creía imperdonable.
De este amor aprendí que hay cargas que no puedo llevar sola, y que hay secretos que no los debo guardar solo para mi. Este amor me enseño que hay ángeles que solo en el cielo deben estar.

Son 3 amores, y obviamente solo a 2 de ellos aun los amo con mucha intensidad... supongo que una vez siendo parte de ti nunca dejarán de serlo.
2 de mis amores nunca dejaran de serlo, por que de ellos aun puedo seguir aprendiendo, y seguir amandonos a nuestra manera y a momentos.