lunes, 4 de junio de 2012

Lo que dejas ir...

De cabello como el agua,
y de pies como la tierra.
De cabeza como el viento,
y cuerpo como el fuego.
De cabello como el azul, dijiste,
como el agua...
Y realista, dijiste,
con los pies en la tierra.
De cabeza ligera, mente abierta,
libre como el viento, pediste.
Y cuerpo cálido,
y a veces ardiente,
como el fuego, dijiste.

Los pies, el cuerpo y la cabeza
los tenia, dijiste...
Y el cabello: alborotado y rebelde,
fue cosa de teñirlo, de mi color favorito...
Mi color favorito después del magenta, claro...
Odias el magenta por que representa a alguien,
una voz, una idea.

Realista me pediste, y realista soy.
(un poco soñadora, pero realista)
De cabello mas de viento que de agua,
para que haga juego con mi cabeza,
pero a su vez mas agua que viento, por que fluye...
"De cabeza de viento", decías, "Que piense por ella misma", pedías.
Y de cuerpo de fuego,
para que sea cálido y abrazable...

Soy realista, por eso sé que te perdí.
Soy de cabello azul como el agua, como te gusta,
pero por eso Lo' conocí.
De cabeza como el aire
y pienso por mi misma,
por eso entendí que tu sin saberlo
me preparaste para El'-
De cuerpo como el fuego, decías,
de cuerpo cálido, como un hogar, decías.
Cuerpo que le da calor a El',
calor que el necesita en su mundo frió.

De manos como el algodón, decías,
delicadas pero fuertes.
De ojos como el chocolate, dulces o amargos...
dulces como el amor y amargos como el dolor, decías.
De voz como el ruiseñor, decías,
dulce y alegre, para no cansarte de escucharla.
Y de carácter como el león, protectora y rebelde,
salvaje pero hogareña.

De manos como el algodón,
suaves para la caricia,
duras para un golpe
y firmes para aferrarse.
De ojos como el chocolate, marrones y dulces,
dulces cuando me amas y me haces sentir tu princesa,
amargos y oscuros cuando me duele el alma,
cuando me enfado y no quiero mirarte.
De voz como el ruiseñor, como de princesa,
una voz que no te cansarías de escuchar, decías.
Y un amanecer ya no fui el ruiseñor que te despertó con su canto.
Y de carácter como el león, con garras y colmillos
al ataque para defender lo suyo, tu.

De manos como el algodón,
que cambiaste por unas "de fibra sintética",
por tenerlas mas cerca.
De tacto poco delicado y nada suaves.
De ojos como el chocolate,
y los has vuelto amargos.
De voz como el ruiseñor.
Ruiseñor que cambiaste con un cuervo,
por que su plumaje negro brilla mas...
No te importa su horrible graznido,
ni su traicionera naturaleza.
De carácter como león,
carácter que pediste reprimiera
para que no luchara por lo que me pertenece
y esa hiena quiere robarme mientras ríe a carcajadas.

De manos como el algodón, que lo enmararon a El'
por su tacto suave, por ser firmes.
De ojos como el chocolate,
siempre un poco dulces aunque sean amargos, Dice'...
De voz como el ruiseñor, bella y tierna,
para disfrutarla cuando se escucha
y nunca olvidarle, Dijo'...
De carácter como león, fiero y salvaje,
nunca maniatada y siempre al asecho.

"Como creía él"- dijo- "que mantendría a su lado
a un león de patas de algodón,
ojos como el chocolate
y voz de ruiseñor...
Melena como el agua y cabeza como el viento,
y las patas siempre en la tierra,
de cuerpo cálido..."
"Como pensaba mantenerte a su lado"- dijo-
"si lo que le gusta es lo convencional, común y normal"
"Mi princesa" así me llama, y te odia, al menos eso dice...